San Javier, mi pueblo, mis recuerdos, es el libro que se comenta esta semana en la sección Acantilados de papel, de vegamediapress.com, en su semana 144 en línea.
Además, una nueva subsección sustituye a Mi biblioteca de fantasía, que la he llamado La luz del viento, Esta nueva sección pretende ser la imposible luz que nos traiga el viento; como digo, algo imposible. Como también lo es muchas veces entender la poesía. Decía Fernando Lázaro Carreter que “el poeta juega muchas veces al ajedrez sin tablero, por eso no entendemos sus movimientos”.
Federico García Lorca comentaba, más contundente, “la creación poética es algo indescifrable, como el misterio del nacimiento del hombre. Se oyen voces, no se sabe de dónde, y es inutil preocuparse de dónde vienen”.
Por cierto, no tendremos poesía traducida. Voltaire dijo que es imposible traducir la poesía, y nos preguntaba, ¿acáso se puede traducir la música?
Me gustaría que, semana a semana, vieseis la luz, pero también su sonido, para que no nos ocurra lo que afirmaba Goethe: “el hombre sordo a la voz de la poesía es un bárbaro, sea quien sea”.
Federico García Lorca comentaba, más contundente, “la creación poética es algo indescifrable, como el misterio del nacimiento del hombre. Se oyen voces, no se sabe de dónde, y es inutil preocuparse de dónde vienen”.
Por cierto, no tendremos poesía traducida. Voltaire dijo que es imposible traducir la poesía, y nos preguntaba, ¿acáso se puede traducir la música?
Me gustaría que, semana a semana, vieseis la luz, pero también su sonido, para que no nos ocurra lo que afirmaba Goethe: “el hombre sordo a la voz de la poesía es un bárbaro, sea quien sea”.
Y para empezar nada mejor que un par de poemas de mi respetado amigo Luis Alberto de Cuenca.
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